
La IA ha encontrado su voz, y las startups están atentas: cómo las empresas disruptivas pueden capitalizar uno de los principales mercados emergentes del 2025.
Las mejoras en el rendimiento y la latencia han permitido que aplicaciones de la IA de voz sean muy cotizadas. Da la impresión de que cada día se presentan nuevas oportunidades, como los centros de atención al cliente, las hostelerías, la atención médica y el aprendizaje de idiomas.